viernes, 13 de septiembre de 2013

Los ojos del perro siberiano

Los ojos del perro siberiano



Argumento

La historia la cuenta un chico que está a punto de viajar hacia otro país y desea desprenderse de toda la carga de su historia y la de su hermano muerto. 
Entre su hermano mayor, que es el que ha muerto, se llamaba Ezequiel, el era 13 años mas grande. 
Su padre era un hombre muy rigoroso e inflexible y sus energías estaban enfocadas en sus negocios. Su madre, una mujer que dedicaba todas sus atenciones a sus plantas que cultivaba en su casa. 
Vivían en una muy confortable y grande casa en San Isidro cerca del río. 
Ezequiel era el primogénito y por sus características físicas (ojos azules y pelo negro, deportista) y por haber sido durante muchos años hijo único era el preferido de los padres. 
El hermano menor, en cambio, tenía ojos y pelo marrón y no había sido un hijo deseado, por lo tanto permanecía al margen de muchos asuntos que involucraban a la familia, en especial cuando comenzaron los problemas por la rebeldía de Ezequiel. 
La novia de Ezequiel había quedado embarazada y él desafió a sus padres y a los amigos de sus padres, negándose a casar con su novia que interrumpió su embarazo. 
Despues Ezequiel enfermó de SIDA y sus padres rompieron toda relación con él y evitaron que los dos hermanos se comunicaran. Contaron a sus amistades que Ezequiel estaba enfermo de leucemia, ya que les parecía menos vergonzoso para la familia. 
El hermano menor se entera de la verdad a través de su mejor amigo que el se entera estorsionando a su hermana ya que sus padres le habian contado la historia de Ezequiel para que la tome como ejemplo y se cuide, se aleja de él por la enfermedad de Ezequiel y decide, sin decírselo a sus padres, buscar a su hermano para recomponer los lazos perdidos aun que sea por el tiempo que le quedara de vida. 
Ezequiel lo recibe feliz y le cuenta la historia de su perro siberiano, que fue rescatado de la muerte por no tener las estrictas características de pedigrí y en cuyos ojos siempre ve amor, no así en las miradas de sus familiares humanos. Comparten largas horas de diálogos que les permite conocerse y tender lazos fraternales compartiendo una salida a una cancha de fútbol (que sus padres no hubieran aprobado), escuchando música o caminando simplemente. 
Cuando Ezequiel fallece él está a su lado, recompensado de alguna manera por la oportunidad de haber compartido los últimos momentos de su hermano.


EL AUTOR

Antonio Santa Ana nació en 1963 en Buenos Aires, donde vive actualmente con sus dos hijos. Trabaja desde hace diez años con el Grupo Editorial Norma en Argentina, donde se ocupa de la edición y circulación de las colecciones infantiles y juveniles. Antes de vincularse a Norma trabajó durante diez años en la organización de la Feria del Libro de Buenos Aires y en la editorial Libros del Quirquincho. Miembro de la comisión directiva de la Asociación de Literatura Infantil y Juvenil de la Argentina (ALIJA) y del comité editorial de la Revista latinoamericana de literatura infantil y juvenil que publica Fundalectura (seccional de IBBY), Santa Ana ha sido jurado de importantes concursos literarios y es parte activa de actividades varias en torno a la literatura. 
Santa Ana no es sólo editor sino también autor. Su libro Los ojos del perro siberiano (1998), sobre la muerte de un muchacho con sida contada por su hermano, ha tenido enorme acogida en América Latina y está siendo traducido al italiano; y su obra más reciente, Nunca seré un superhéroe(2000), sobre el tránsito agitado de la niñez a la adolescencia, se ha convertido en favorita de muchos lectores. En su estilo directo y un tanto lacónico, si bien muy profundo, parece radicar parte de su éxito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario